Tengo algún conocido que expone sus obras en ARCO, esos mismos conocidos que te dicen “…llevo cuatro meses sin pintar…” y se quedan tan anchos, me parece inverosímil que un artista se pueda permitir esta especie de lujos. ¿Cómo son capaces de mantenerse en el candelero y trabajar tan poco?. Hace cuatro años que no visito esta feria, y es que estoy esperando ansiosamente una “criba digital”, que nos saque de un plumazo tanto seudoartista que está ocupando un lugar que no merece, gracias a la aportación gratuita de la tecnología , esa tecnología que nos permite hacer algo que quede bonito encima de la "chimenea francesa". Que bien ya tenemos productos manufacturados, para llenar una feria de porquería…
Este enfado viene, a la maravillosa visita que he hecho al prado, he visto a mi querido y amado Francis Bacon, grandioso y tortuoso… el artista aquí y siempre, es esa persona que persigue durante toda su vida el mismo cuadro, y que incapaz de conseguirlo arrastra consigo una retrospectiva poéticamente perfecta, el artista es ese narciso insoportable que se odia en su día a día, y eso se palpa individualmente en cada una de sus propuestas rizadas y mascadas…
Este año voy ir a ARCO, espero ver algo más que a los Canogart, Tapies, y otros pocos que aún nos quedan vivos y trabajando obsesivamente como debe ser…
Como un día dijo el genio de los genios, “la inspiración no vale de nada si no te pilla trabajando”…
Decir también que estoy totalmente a favor del uso de la tecnología, pero no por ello descansar en ella, y confundir estética y arte como borregos...
Me cago en la colección Taschen… ups, perdón…
2 comentarios:
Se ve que sabes del tema... ya nos contarás.
Ojalá la justicia poética fuera la justicia estatal...yo desde aquí grito contigo...Gracias por los besos sordos...También peco de ceguera...
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